Mientras la UCTL trata de unificar al sector ganadero para formar un grupo mayor y mas fuerte desde el que afrontar los tiempos que vienen, se aprobarán en los Presupuestos Generales del Estado, en plena ruina económica, 4,6 millones de euros que serán destinados a ayudas para las formaciones “ecologistas” afines y votantes de Unidas Podemos. Este dinero será gestionado por la Dirección General de derechos de los Animales que depende de la vicepresidencia de Pablo Iglesias. La mayor parte de ese dinero no será otra cosa que una gran campaña del mascotismo, el gran negocio del siglo.
El impacto del virus sobre la economía no ha cambiado los planes del Gobierno de coalición, que fue el primero en crear una dirección general destinada al bienestar de los animales. La apuesta ha quedado concretada en el anteproyecto de los PGE, que recoge una partida específica de 4,6 millones para los programas que desarrolle ese departamento. El dinero se destinará a otorgar subvenciones a las entidades que rescatan y tratan animales abandonados, campañas de concienciación y a financiar el estudio y la creación del bautizado como ‘DNI animal’ para que las especies potenciales de compañía estén tan controlados como los que se destinan a la producción. Es decir, toda una campaña para promover desde el “buenismo” el negocio de las mascotas.
El rescate de perros y gatos mascotas será el requisito primero para el reparto de esa partida presupuestaria, sin que esté definido criterio alguno. Al mismo tiempo, se destinará parte del dinero a una campaña de publicidad continuada sobre la mascota. Más de cuatro millones y medio de euros al año para seguir lanzando a la sociedad el concepto de trato humano, derechos y bienestar animal de las mascotas. Para hacerlos cada día más humanos y, por tanto, más negocio en cuidados, asistencias, ocio, alimentación, dietética, ocio y todo lo que suponga sus nuevos derechos.