REDACCIÓN
MADRID (España). Rafael Campos de España, decano de la prensa taurina, dedicó en el pasado San Isidro unas líneas a la recientemente desaparecida Rocío Jurado, con motivo de la lidia de novillos de Yerbabuena. En esta ocasión, rescatamos el texto como homenaje a la cantante y ganadera.
Décimo tercera de la feria de San Isidro. Lunes 23 DE MAYO DE 2005
«A Rocío Jurado reina de la canción y ganadera»
ROCÍO, tu noble condición de reina y de «emperaora» del Cante mas la faceta de ganadera cuya divisa bautizaste con el precioso nombre de YERBABUENA, hace que quiera brindarte esta crónica en mi calidad de Decano de la prensa taurina.
Quizá la tarde no haya sido la más idónea para este brindis, pero verte en los toros con tu ánimo, tu fuerza y simpatía ha sido la espoleta que ha lanzado el cohete de mi vieja admiración por tu persona y por tu arte. Si yo fuera torero mi brindis sería : !Ole las mujeres guapas!
No soy casi nada supersticioso, quizá sólo ese punto que tenemos todos. La corrida de hoy era décimo tercera de la feria, y el numerito no me hace mucha gracia, y quizá haya influido que la vieja frase: «corrida de expectación, corrida de decepción», hayan sido causantes de truncar esperanzas e ilusiones.
Quienes nos conocen leen y escuchan desde muchos años, recordarán que siempre fuimos idólatras del toro de lidia, ese «Totem mitológico», que se presta a la fábula de un espectáculo insólito. Bien, pensamos que ser ganadero de bravo es una fantasía, como un noviazgo que cuajará si los novios respetan su amor y aceptan sacrificios y decepciones. El criador de reses bravos es una persona que se encuentra, según nosotros, en esa situación. Yo no se las entretelas que habrá sufrido la elección y la lidia de los toros de hoy, pero pienso humildemente que no se puede venir a MADRID «y caramba» a ningún sitio, con corrida tan destartalada, mansa y falta de trapío.
La Divisa del PUERTO DE SAN LORENZO ha venido siendo clásica en estas fiestas, pero lleva uno años, que las cosas no rueda, y este, a pesar de este nuevo nombre de LA VENTANA, no ha servido para dar paso, a nuevos aires de la bravura, sino a la mansedumbre con genio y a la fealdad.
Los ganaderos en general saben como es MADRID y conocen su exigencias, por eso no se puede hoy jugar con los públicos en momentos tan críticos para la fiesta como los que estamos sufriendo. Mal muy mal los del Puerto, esperemos cambien el rumbo al siempre sagaz barco de la bravura y la nobleza.
La plaza, una vez llena era un congreso de personalidades y taurinamente hablando, de un mujerío que espantaba. Ocupó el Palacio Real La Infanta DOÑA ELENA acompañada por un grupo de mujeres, que brillaban en la altura como el cristal cuando recibe el escorzo de un rayo de sol.
Abrió la tarde el buen torero mexicano EL ZOTOLUCO, Lalo como le llaman los amigos, hizo el esfuerzo y quiso, pero el genero torístico rechazaba las buenas maneras del Azteca. El público reconoció su esfuerzo y le aplaudió. ENRIQUE PONCE es un coloso, un fuera de serie en la concepción y demostración de su arte. No sé si él tuvo alguna culpa, no lo creo, de que le echarán en primer lugar un novillote indecente y en quinto un toraco que sólo una muleta como la suya fue capaz de lograr alguna aroma del «Pantano» de su oponente. Antes y ahora se dividieron las opiniones para juzgar al valenciano. Algo parecido le ocurrió al JULI, decíamos el otro día respecto a JULIÁN que le están pasando facturas de sus éxitos y condiciones de figura del Toreo, a poco que puedan le niegan el pan y la sal.
Con los palos muy bien CARRETERO y en la brega EL BONI.
«El sueño de los toreros, es juicio gracia y perdón»
Rafael Campos de España
Decano de la Prensa Taurina