«Bienvenido, Adolfo»
Por Bayoneto
Entró Adolfo en territorio ocupado por Victorino, de telonero. Entró Adolfo en tierra de nadie después del petardo subvencionado de Palha y la falacia «escolarista»del jueves. Entró en Las Ventas un año después de la birria de corrida reseñada para aquel «gesto» de Joselito y Tomás. Entró y salió con la cabeza bien alta. Un año después sus toros reivindicaron varias cosas: una, la presencia, otra que es un ganadero honesto (otro va y se tira al ruedo para ser sacado en hombros). Y entre la entrada y la salida, una corrida brava en varas y buena con distintos matices: encastado, bravo y humillado el primero, Madroño I, toro premiado con la vuelta al ruedo. Manejable pero sin profundidad el segundo, noble el tercero, peligroso el cuarto, bravo y de gran pitón izquierdo el quinto y deslucido el sexto. Tras los seis actos, el promedio del exámen hace que Adolfo Martín recupere el crédito en Madrid. Bienvenido (…continúa)
…crónica de Bayoneto
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…entrevista a ADOLFO MARTÍN
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