MUNDOTORO, Madrid (España).
18/10/00. La muerte del fotógrafo taurino Esteban Chapresto Gil – Chapresto– ha conmocionado al mundo de los toros y, especialmente, a sus compañeros de profesión. Manuel Durán fotógrafo y escritor, autor de Historia de la Fotografía Taurina junto a Juan Miguel Sánchez Vigil (Madrid, Espasa Calpe, 1991), ha comentado a mundotoro que «Chapresto ha marcado una época. Aunque no tuve el gusto de conocerlo personalmente, sé que era un gran profesional. No hay más que recordar algunos de sus trabajos, como la famosa foto de Luis Miguel Dominguín en la plaza de Logroño». Ésa foto ilustra este texto, con la cortesía de la editorial Espasa Calpe y de Manuel Durán y Juan Miguel Sánchez Vigil.
Para Durán, «Chapestro se vino un poco abajo no hace mucho tiempo, cuando falleció su esposa. Ahí tuvo un bajón lógico del que, desafortunadamente, no se sobrepuso».
Chapresto comenzó su actividad taurina en la década de los años cuarenta, cuando empezó a cubrir la información taurina de la zona norte de España para las revistas especializas de la época, caso de Dígame, El Ruedo y, más modernamente, Aplausos, donde era un colaborador habitual en los últimos tiempos. Precisamente, uno de sus últimos trabajos fue la información gráfica de la reciente Feria de Logroño. Volcado en la fiesta de los toros desde joven, en su archivo guardaba multitud de imágenes de la historia taurina del último medio siglo. Pero uno de sus grandes logros fue el reportaje sobre Picasso que ilustró un artículo de Mariano Tudela, publicado en El Ruedo. Las fotografías del genial pintor se hicieron en la plaza de toros de Nimes, en 1957.
En la citada obra de Durán y Sánchez Vigil, el fallecido dejó para la posteridad las siguientes palabras: «Siempre he tenido gran afición a la fotografía, procurando crear motivos originales, tanto en el tema del cartel como en portadas de revistas. En palabras de Rafael Peralta, la máquina es para mí lo que para él es el caballo; no podemos vivir sin ellos».