RAFA CARRIÓN
VALENCIA (España) El matador de toros Vicente Barrera ha dado una vuelta al ruedo en la plaza de toros de Valencia en el último festejo celebrado esta tarde que ha puesto punto y final a la Feria de Fallasque ha resultado deslucido por el escaso juego de los astados lidiados. El valenciano ha protagonizado ante su primer astado de Juan Pedro Domecq un trasteo en el que ha primado la voluntad del torero sobre la calidad de la faena, que remató de buena estocada.
La mayoría del público pidió la oreja silbando, por lo que el trofeo no fue concedido. Luego, con el quinto, el mejor toro de la tarde, lo intentó con la mano derecha sin molestar al animal y consiguió llegar al público a base de ligar las series, sin embargo, el fallo a espadas le privó de conseguir una oreja que parecía segura. Enrique Ponce tuvo una actuación correcta toda la tarde, la primera ante un toro noble y fácil y los mejores momentos los logró con la mano izquierda. Después, ante el cuarto no pudo sacar faena pues el toro se paró.
Manzanares hijo por su parte, ha dejado ver apuntes y una mayor predisposición que otros años, lo ha intentado con su lote pero poco pudo hacer. Con el sexto, que apenas se movió optó por desistir e irse por la espada.
Duodécima de abono y última de Feria. Con lleno de No hay billetes en tarde nublada pero de buena temperatura se han lidiado seis toros de Juan Pedro Domecqaceptablemente presentados, muy nobles, pero justos de fuerza y de raza. Primero devuelto por inválido y que fue sustituido por otro del mismo hierro igual de noble y escasa fuerza. Enrique Ponce,palmas tras aviso y silencio; Vicente Barrera, vuelta tras petición y ovación tras aviso y José María Manzanareshijo, silencio y silencio.
GALERÍA FOTOGRÁFICA DE NEREIDA FABUEL