ALBERTO LOPERA
BOGOTÁ
(Colombia )Una
media entrada en la plaza de Santamaría, a pesar de la lluvia caída
antes del festejo inicial de la temporada 2006 en la capital
colombiana.
Se lidió
una preciosa novillada con el hierro de Armerías, ganadería propiedad de Rafael Moscoso, que además de magnífica
presencia mostraron gran juego, embistiendo muy bien a los caballos y mostrando
calidad en la muleta. Cuatro de ellos fueron aplaudidos en el
arrastre.
Abrió el
festejo el novillero José Luis Robayoquien se mostró
con buenas maneras en su primero, especialmente en series de mano baja en
redondo. Paseó la única oreja de la tarde en medio de aplausos. En su segundo,
anduvo un poco a merced del toro y no terminó por acoplarse por lo que fue
silenciado.
Victoriano
Garcíatuvo por
delante dos magníficos ejemplares a los que intentó torear de buena manera, pero
sin lograr redondear faenas como lo merecían los nobles ejemplares de Armerías.
Dio una
vuelta al ruedo por su cuenta en su primero y en el otro se silenció su
actuación.
Mucha
expectativa por el debut con picadores del joven diestro español Rubén Pinar quien ha llegado de México con buen número de festejos
encima. Se le vio con oficio y deseos de agradar a pesar de haberle
correspondido el lote con mayores complicaciones. Fue aplaudido en su primero y
premiado con la vuelta al ruedo en el que cerró el
festejo.