Una especie de reivindicación de la Fiestanos llega desde su lado oscuro. Una vez más el toro, con su peligro tan minimizado absurda e interesadamente ,recupera una verdad sometida a interrogantes desde fuera y desde dentro del propio espectáculo. José Tomás ha sido golpeado dos veces seriamente este año, al igual de Enrique Ponce, vivo y saludable ahora, a las puertas de la fatalidad en la noche del lunes pasado. Pero hay más: Joselito en fuera de juego con una gravísima lesión, Rivera Ordóñez no sabe cuándo volverá a los ruedos, Juan Mora se salvó de otra cornada dura , pero no de la propia cornada, …hasta Paco Ojeda no se ha librado de la verdad del toro: aquí se sufre, se hiere y hasta se muere de verdad.
El toreo es verdad por encima de todo. Y lo es porque la sangre es verdad, el dolor es real, las lágrimas son muy ciertas..no hay nada virtual…eso no es el Gran Hermano. Zarandeada una vez más esta Fiesta de hombres, puestos en tela de juicio los triunfos de las figuras, la seriedad del toro,…la Fiesta busca el recurso más fiable, el más contundente, el del dolor, para regresar a su verdad. Y lo hace fuera de los ciclos grandes, allí donde se vive la Fiesta en plazas supuestamente fáciles y con el toro fácil: Nimes, Granada, León, Burgos, Badajoz, Algeciras. La mayoría de las veces a manos del toro denostado, el que dicen que no tiene peligro porque «viene de lo de Domecq«. Venga de donde venga el toro bravo hiere y la mayoría de los toros reseñados en las cogidas han sido bravos, encastados…Este es el toro del triunfo, ..o el del hule.
Son estas líneas un reconocimiento al dolor con hombría de los toreros mencionados y de otros que no ocupan espacios en los telediarios porque no son famosos como José Tomás o Ponce. Un reconocimiento escrito pero también una llamada de atención y un toque de atención. Llama la atención la virulenta reacción contra éste y otros medios por opinar, por criticar o por emitir libremente su opinión sobre ciertos abusos con la presencia del toro. Aquí, desde nuestro inicio, hemos abierto las puertas a la opinión de todos. Y la nuestra es la búsqueda de lo razonable, marginando al toro escaso y deplorando al armario empotrado. Criticar es saludable pues desde la crítica puede partir y hacerse más grande el elogio. Sólo tiene crédito el elogio que nace de una visión crítica. Por eso se escriben estas líneas, para ensalzar la verdad de una fiesta acusada.
Se acusa incluso de la existencia de un sistema antifiesta interno inexistente, pues el toro, grande o chico, lo desbarata todo. No hay sistema que impida la cornada, la sangre, el éxito o el fracaso. En el toreo hay intereses encontrados, siempre los hubo, pero contra la bravura no hay quien pueda. Es paradójico que, idos de rositas los políticos (auténticos dueños de plazas, pliegos, ferias y dividendos) se intente un enfrentamiento cainita entre gentes que, al fin y al cabo, tenemos la misma idea sobre el periodismo y sobre el toreo: la máxima de la verdad del toro y del torero. Es insultante que, una fiesta vigilada autoritariamente, muestre su más descarnada verdad en los más ricos, en las figuras, en la supuesta élite acomodada y con toro «cómodo». Queda desnuda de razón y de autoridad esta autoridad vigilante y queda aclarado que el único toro cómodo es el de las fotografías.
Mientras Antena 3 urdía un espacio de pago, un montaje con dinero para, supuestamente, denunciar corruptelas en el toreo, en esa cadena se emitía con grandeza el escándalo más interesado: el de un sistema internacional y multinacional pseudodeportivo, que, para abrir mercado, es capaz de adulterar sus resultados. Y la prensa calla, o, al menos, apunta pero no dispara. Ahí no hay cámaras ocultas. Un paralelismo: mentira y corrupción del Mundial de Fútbol, verdad en el toro. En el fútbol, queridos compañeros y autoridades sí hay corruptelas, manejos y una estructura de sistema, no en el toro. Entre otras cosas porque al toro en la plaza no hay quien lo compre ni lo convenza para relajarse. El toro no sabe si delante está Tomás, Ponce o el sursum corda. El toro manda al hule a cualquiera porque esta Fiesta es de verdad. Lo demás, pamplinas, mentiras, medias verdades y alguna cinta de vídeo adulterada.
….Reportaje: Percances de junio: alarma en el toreo (Fotos y gráficos)
