Por C.R.V.
Ningún líder de la polítika actual que forma parte del pacto de gobierno actual, dirá nada de Dax y sus festejos de toros. Esos polítikos ¿españoles? de hoy (con k de kaka y entre interrogante su sustantivo) abrieron escándalo con cada plaza de toros que ha tenido el acierto y la valentía de dar toros. Los tipos como Monedero, alias primer tonto golfante e Iglesias, vicepresidente segundo pero primero en estulticia, nada dirán. Porque decir algo sobre la foto del gentío en los toros de Dax en plena crisis sanitaria, sería tanto decirse a ellos mismos la kaka de polítikos que son.
Es muy fácil arremeter bilis contra el suceso de El Puerto de Santa María porque buena parte de este país que pasta subvenciones, acoge de buen grado llamar fachas, asesinos y demás injurias gratis contra el aficionado español. Fiscales y Gobierno dejan a estos polítikos hacer y decir para asegurarse un gobierno de koalición. Pero ¿Francia?. Mucha tela es esa. Francia. Una República, su mantra o toc de nacimiento, es mucha tela. Un país que llevó la libertad a América. Un país de calidad democrática de matrícula de honor, es mucha tela.
Nada dirán porque las imágenes de Dax dicen mucho de la tolerancia que esta demokracia nuestra no tiene. Dice mucho más de una gestión sobresaliente en la crisis del coronavirus y dice mucho menos de la gestión de nuestros polítikos. Dice mucho que suene el himno francés y el español de la mano sin que nadie se sienta ofendido o acusado de facha. Dice mucho que un donostiarra de apellido Uranga, ganadero, sea ya hijo adoptivo de la ciudad.
Por eso esta polítika calla. Se esconde. No son nada. Kaka en un país donde la democracia es ya demokracia. Es decir, una democracia okupada por la polítika. Esta democracia es, como aquellos que más teme la medicina de los contagiados, una dictadura asintomática. No se nota, pero lo es. Que miedo da la polítika cuando no muestra sus síntomas de dictadura.