IVÁN RUBIO
MADRID (España).– MT: Aficionados y críticos coinciden en señalar que eres uno de los mejores muleteros de los últimos tiempos. ¿Qué significa esto para ti?
– E.M: «Es un halago y me llena de orgullo. Yo trato de hacer las cosas con mucha pureza y torear muy despacio. He tenido la suerte de que ese toreo me ha salido varias veces en sitios importantes y me lo han valorado. Intento seguir ese camino, ser un torero muy redondo y hacer las cosas con mucha pureza y mucha verdad, y trato de mejorar mucho. Veo que, gracias a Dios, los aficionados y la prensa me están valorando bastante y eso me motiva para seguir.
– MT: ¿Dónde está el secreto de la muleta de Eugenio de Mora?
– E.M: «No hay ningún secreto, solo torear muchísimo de salón, tratar de pulir los defectos, mejorar y mejorar. Son muchas horas de trabajo y ahí sigo. Tienes la satisfacción de que, cuando consigues torear un toro así, es muy bonito, y eso es lo que busco. Además, si la gente lo valora y se da cuenta que estás intentando hacer las cosas bien, es muy gratificante.
– MT: Un maestro muy cualificado sí que lo tienes cerca…
– E.M: «Llevo tiempo con los Lozano y estar al lado de Pablo Lozano también ha ayudado. Es un gran maestro y su concepto del toreo es el que a mí me gusta y trato de hacer. Eso y las muchas horas que uno le dedica, la ilusión, tu dedicación a la profesión, que luego se ve reflejado en la plaza».
— MT: A la vuelta de la esquina está ya San Isidro.¿puede ser el empujón definitivo para Eugenio de Mora?
– E.M: «Hombre, yo espero triunfar porque es una feria vital, como ocurre con Sevilla. Es una feria determinante de la temporada y son muchos meses de pensar en esa plaza. El objetivo es triunfar, estar muy bien y tener un San Isidro importante para seguir cada vez más para arriba. Un triunfo en Madrid siempre es un empujón y, sobre todo, una satisfacción y un orgullo personal muy grande. Triunfar en Madrid y en Sevilla siempre tienen repercusión en la temporada de un torero».
– MT: Estás anunciado en dos carteles de relumbrón, que son a los que aspira cualquier torero.
– E.M: «Son carteles de mucha responsabilidad pero no he llegado ahí por casualidad. Si miras mi historial en Madrid, ves que he entrado ahí por derecho propio. Yo estoy a gusto en esos carteles, dentro de la responsabilidad que tiene ir a una feria así. Es por lo que uno lucha y por lo que uno se deja la piel cuando sale a la plaza, y ves que va teniendo una recompensa yo creo que justa».
– MT: ¿Te sientes esperado y reconocido por los aficionados?
– E.M: «Sí, sobre todo en los sitios de importancia y responsabilidad, cuando consigo torear un toro como a mí me gusta y hacer las cosas como yo las siento, tengo una conexión muy buena con el público y de forma inmediata, como se pudo ver el otro día en Sevilla. La gente entró de lleno en la faena enseguida. Es un privilegio para disfrutar de la entrega del público de manera tan rápida, es bonito. En líneas generales me siento bien tratado por el público. Noto que hay expectación por verme, y respeto. Eso es bueno y gratificante, que te esperan y que esperan verte dar 15 ò 20 muletazos bien. Eso hace también que te crezcas».
– MT: Has triunfado en Sevillay Madrid, entre otras muchas plazas, ¿qué destacarías de cada una de ellas?
– E.M: «Esas dos plazas son las que más me motivan, junto con la México, una plaza también muy especial. Son plazas que marcan la diferencia, sin quitarle importancia a las demás. Son muy transcendentales, te juegas mucho, y donde tienes que dar de verdad tu medida y entregarte a tope. Las dos tienen un sector de aficionados muy selectos, que saben entender y saben valorar lo que se hace al toro de verdad, con entrega y con pureza, y lo saben ver inmediatamente. Sevilla es una plaza que suele respetar mucho más a los toreros. Suele tener un ambiente parecido prácticamente todos los días. Por el contrario Madrid es más cambiante, unos días el público está más revuelto, otros días está mejor….no suele mantener una misma tónica. Pero son dos grandes aficiones y dos plazas donde te lo dan todo».
– MT: ¿Crees que Sevillase ha «madrileñizado» últimamente, como se ha dicho a lo largo de la feria?
E.M: «No sé. Tampoco tengo mucha experiencia en esta feria, sólo he estado tres veces. Yo siempre he encontrado al público más o menos en el mismo aire. Con el respeto que siempre ha caracterizado a Sevilla y con la solera y la afición que tiene. Puede ser que sea así pero yo creo que no es de ahora, siempre a la feria de Sevilla ha ido mucha gente de muchos sitios».