MUNDOTORO > Madrid
López Simón es el primer nombre propio de Pamplona. Tres orejas, pese a que el presidente le negó una del tercero, y la sensación de un torero importante: ‘El toreo es mucho más grande que el número de orejas. El toreo es entrega, ahora en estos tiempo que es más bonito que lo que ocurre en una plaza. Un toro y un torero se juega la vida y la puede perder de verdad. Queda mucho por aprender’. El madrileño cortó una oreja tras fuerte petición en lo más destacado de la primera corrida de San Fermín: ‘Para lo que uno lucha, entrena y se sacrifica es para estar en estas plazas y con el toro con importancia. Me he sentido a gusto y el hecho es que se ha ido con una oreja para dentro. Si no se exigente con uno mismo, tiene la batalla perdida antes de empezar’.
El sevillano Pepe Moral completó su primer turno en su paso por Pamplona: ‘El toro no ha sido fácil y he podido torearlo bien. Una pena la espada porque estoy matando bien. El toro tenía buen aire y se abría aunque siempre punteaba mucho. He intentado que me tocara la muleta las menos veces posibles y al final el toro se ha templado. He ido haciendo el toro poco a poco, abriéndole los caminos pero me quedo con buen sabor de boca’. Con el quinto, solo pudo demostrar sus ganas: ‘El toro no pasaba y tenía algo de calidad pero nada de recorrido. Me voy contento pero a la vez contrariado porque es una plaza a la que se viene a triunfar. No he toreado un toro con esos pitones nunca’.
No fue la tarde del ídolo de Pamplona, Juan José Padilla: ‘Ha sido imposible. No he estado a gusto toda la tarde. No he tenido sensaciones nada buenas. Al toro le hemos cuidado pero la bondad se ha convertido en genio. Me ha costado trabajo. Tenía querencia en toriles y he querido corregirlo pero no he podido. Sotaba la cara, venía muy descompuesto en la embestida y no podía dominar la embestida. El piso está muy suelto, es peligroso’.