IVÁN RUBIO
MADRID (España).Antonio Ferrerareaparecía este domingo en Arles (Francia)después de la grave cornada sufrida en Castellónel 25 de marzo. El extremeño dejó a un lado sus molestias físicas para estar en el coliseo de la ciudad francesa y acabó siendo el triunfador de la tarde tras cortar las dos orejas a un sobrero de Garcigrande.
«Era un reto personal reaparecer en Arles tras una cornada tan fuerte y que me vieran igual que si no hubiera pasado nada, sin gestos de dolor ni aspavientos»,explica Antonio Ferrera.
Un vendaje especial en el muslo, donde aún presenta los orificios de los drenajes, hizo posible el «milagro». «Salí mentalmente al cien por cien. Me molestaba por momentos la herida pero eso se suplió con ganas y actitud. Físicamente me encontré bien y psicológicamente no me afectó».
Un sobrero de Garcigrande,dentro de una deslucida corrida de Blohorn,permitió el triunfo de Ferrera. «La corrida estaba saliendo complicada pero salió ese toro al que pude torear como yo quiero: con ritmo, despacio y con profundidad. Además fue una lidia completa desde el capote y las banderillas. La faena de muleta fue muy sentida, con la gente de pie. Fue muy bonito, un triunfo de mucha satisfacción interior en una plaza de primera».
Valencia, Castellóny Arleshan sido los tres toques de atención de Antonio Ferrera,en una temporada que se antoja ilusionante para el extremeño. «Han sido tres puertos muy importantes. Es importante estar ahí desde el principio y poder llegar a Madrid, el reto más importante del año, precedido de triunfos en plazas claves».
Ahora Ferreratrabajará para recuperarse plenamente de la cornada de Castellónen las dos semanas de descanso que tiene hasta su próximo compromiso del 1 de mayo. «Tengo el muslo hinchado del esfuerzo de ayer, y de los esfuerzos que he hecho para poder llegar a tiempo a Arles».