MIGUEL FERNÁNDEZ
Colmenar Viejo (Madrid).Una corrida grande -en algunos casos basta de hechuras- y muy deslucida en conjunto ha dado al traste con el segundo festejo de la Feria de los Remedios de Colenar Viejo. Tan sóloUceda Lealpudo pasear un trofeo del cuarto, un animal noble pero flojo y falto de transmisión al que muleteó con elegancia y buen trazo pero sin poderle apretar en ningún momento. Tanto Javier Cortéscomo José Manuel Mas se estrellaron con dos lotes infumables que no les dieron ninguna posibilidad.
Uceda Leallogró ante el cuarto los momentos de mayor relieve de la tarde. El madrileño supo administrar los tiempos con inteligencia en una labor que contó con momentos de estética y cuidada composición. El pinchazo previo a la estocada no fue óbice para la concesión del trofeo. Anteriormente el toro que abrió la tarde, tan serio como falto de raza y fuerzas, no le dio opción, a pesar de sus intentos por ambos pitones ante las protestas del público por la flojedad del astado.
El segundo tuvo que ser devuelto por flojo y en su lugar salió al ruedo el quinto, ya que Javier Cortésdecidió correr turno. Este fue un animal incierto y que nunca se entregó, defectos que no todo el público supo apreciar, llegando a posicionarse un sector a favor del astado. Cortésintentó ponerle bien la muleta en todo momento pero el toro nunca quiso tomarla por abajo y se revolvió tras cada muletazo, por lo que impidió cualquier opción de lucimiento. El quinto fue un sobrero de Conde de Mayaldebasto de hechuras y bruto de comportamiento. Apretó en varas, recibiendo un buen puyazo de Francisco Plazasy en la muleta no ofreció ninguna opción a Javier Cortés, que pasó mucho tiempo en su cara pero que no tuvo más remedio que irse a por la espada de vacío.
José Manuel Masse estiró con gusto en el capote tanto a la verónica como en un buen quite por chicuelinas. Sin embargo, el toro, con movilidad en los primeros tercios, se vino a menos en la muleta, aplomándose y haciendo vanos los esfuerzos de Mas, que remató con habilidad a espadas y saludó una ovación. El sexto fue otro Corbacho grande y flojo con el que no tuvo ninguna opción, ya que el animal claudicó en cada intento del madrileño por hacer faena.
Plaza de toros de Colmenar Viejo. Segundo festejo de la feria de los Remedios. Un tercio de entrada. Cinco toros de Corbacho Grande, y un sobrero lidiado en quinto lugar de Conde de Mayalde, muy serios y de gran romana, aunque faltos de raza y fuerzas en conjunto. Uceda Leal, silencio y oreja; Javier Cortés, silencio y silencio; y José Manuel Mas, ovación y silencio.