Le tiraron al suelo, le rompieron el móvil y golpearon a un amigo
Los antitaurinos grabaron la escena a la espera de una réplica
La gendarmería, testigo de los hechos a veinte metros
Las agresiones de los antitaurinos en Vauvert I YOUTUBE
MICA CRESSENTY > Francia
La violencia de los antitaurinos suma y sigue. Esta vez los hechos han ocurrido en Francia, país donde los aficionados y profesionales están más protegidos, en teoría. La víctima en esta ocasión ha sido el matador de toros Marc Serrano quien, vestido de calle, se dirigía a la plaza de toros de Vauvert. Fue agredido por un grupo de cuatro antitaurinos violentos, uno de ellos una mujer que grababa la escena de cómo provocaban a Serrano, pretendiendo que él reaccionara y así invertir la historia. Lo más alarmante, es que la gendarmería fue testigo presencial de la escena.
Los hechos se produjeron en una calle cercana a la plaza gala cuando Marc Serrano y un amigo suyo iban caminando en dirección a la plaza. Primero se les acercó un antitaurino y empezó a insultarle. Serrano y su amigo, manteniendo la calma, no le hicieron caso al individuo. Entonces, dos ‘antis’ más intervinieron rodeándolos, para cerrarles el paso. Una chica del grupo ‘anti’ se puso a diez metros con una cámara para grabar la escena: los antis provocando al matador de toros y su amigo, esperando a que ellos respondieran para así grabarlos y hacerse pasar por víctimas. Una maniobra ya conocida.
Como Serrano vio a la chica grabando, sacó su móvil para grabar también lo que ocurría. Uno de los que le rodeaba por detrás le pegó un fuerte golpe en la espalda y lo tiró al suelo. Otro cogió el móvil y lo tiró al suelo para romperlo. El tercero le dio otro golpe al amigo de Marc Serrano.
Lo peor de esta escena es que había un cuerpo de gendarmería a escasos veinte metros, y se quedaron mirando, testigos de la escena desde el principio, y no se movieron. Cuando ya se levantó Serrano, entonces intervinieron los gendarmes porque temieron que empeorase la situación y evacuaron a los dos ciudadanos. Cuando Serrano se quejó de que ellos fueron testigos y no intervinieron, el jefe de gendarmería le respondió: ‘mientras no os agreden no podemos hacer nada’.
Así son las fuerzas estatales para proteger al ciudadano. Menuda protección tenemos los ciudadanos, los que cumplen con sus deberes y las leyes; mientras los antis, totalmente fuera de la ley, actúan con total libertad.
Marc Serrano puso una denuncia, como debe ser, porque fue agredido, y corrió peligro delante de las fuerzas policiales, las que juraron bajo el honor defender al ciudadano.
Desde aquí, una vez más, pedimos al gobierno y fuerzas que tomen medidas desde ya, porque esto va de mal en peor. Luego serán los primeros en llorar las desgracias. Y lo repetimos: ya será tarde.