PAULA ZORITA
Palencia (España). Enrique Ponce, Manuel Jesús El Cidy Daniel Luquehan cortado una oreja cada uno en el festejo que ha puesto punto y final a la Feria de San Antolín, un espectáculo en el que se ha lidiado una desigual corrida de Puerto de San Lorenzo que ha deparado una primera parte de escaso contenido y un segundo tramo de espectáculo de mayor relieve.
Ponceya anduvo paciente y sereno con el primero, un toro que en los primeros tercios se comportó de manera abanta, sin ninguna fijeza. Ponce, lo sobó, lo enceló y poco a poco, dando los tiempos oportunos desgranó una faena muy elaborada que adquirió más notoriedad por el pitón derecho. La misma tónica y patrón se repitió en el cuarto, una labor tesonera y pausada con un toro tardo al que arrancó los muletazos de manera laboriosa, tratando de tirar de su embestida y llevándolo largo en una faena rematada de un efectivo espadazo.
El Cidse mostró voluntarioso con el segundo en una faena de más a manos con un ejemplar de poca clase, que tendió a quedarse corto. El quinto, noble y con lcase aunque falto de empuje, fue el de mejor condición. El público se puso a la contra en los primeros tercios por su flojedad pero a la postre fue el animal de mayor acometividad y El Cidlo aprovechó en series de extraordinario trazo, sobre todo por el pitón izquierdo, pues por el derecho no repitó con igual son y al faena no tuvo igual ajuste.
Luquepechó por delante con un sobrero de Los Bayonesmanso y complicado con el que anduvo firme y extrajo muletazos destacados en zona de tablas, provocando y atacando mucho a su enemigo. El sexto fue un animal abanto de los primeros tercios que esperó al torero en chiqueros en el inicio de la faena. El sevillano trató de que el toro se olvidase de su querencia en una faena de entrega que aunque no tuvo continuidad contó con muletazos sueltos de relevancia. Además una estocada perfecta terminó de convencer a los espectadores.
Plaza de toros de Palencia. Última de la feria de San Antolin. Tres cuartos de plaza. Toros de El Puerto San Lorenzo, de distintas hechuras y comportamiento. Mejor el quinto. Un sobrero de Los Bayones(3º) manso y complicado. Enrique Ponce, ovación y oreja; El Cid, aplausos y oreja; Daniel Luque, silencio y oreja