El torero y ganadero Rafael Iñíguez, más conocido como “El Rivereño”, ha muerto a los 74 años de edad, víctima del coronavirus después de que fuera ingresado en un hospital hace una semana. Entonces su estado era estable aunque sus pulmones estaban muy débiles. Sin embargo, la situación empeoró hasta que la pasada madrugada no pudo superar la lucha contra el Covid-19, según informa El Sol del Centro.
Ganadero de la dehesa de Garabato, junto a su fallecida esposa doña Rosalina Rangel, gestionaba esta divisa actualmente junto a su hijo Hiram Iñiguez Rangel en Pabellón de Arteaga, Aguascalientes.
Rafael Iñiguez Ruiz nació en Jocotepec, Jalisco, el 24 de octubre de 1946, pero creció en la población también jalisciense de Yahualica. Siendo joven trabajó en Estados Unidos, hasta que se aficionó a la tauromaquia y se convirtió en torero, llegando a actuar en plazas como “La Aurora” en Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México; en las de Guadalajara, Durango, San Luis Potosí y Aguascalientes, entre otras.
Hijo de doña Petra Ruiz y de don Faustino Iñiguez, al “Rivereño” le sobreviven dos hermanas, Raquel y Angélica, además de sus hijos Rafael, Rosalina, Hiram e Imperio. Al parecer, será incinerado, aunque no han trascendido más detalles de donde se depositarán sus cenizas. Mundotoro quiere hacer llegar a sus familiares su más sentido pésame por esta pérdida. D.E.P.