
ROBERTO MARBÁN
Madrid (España).El filósofo francés Francis Wolffha presentado este sábado su último libro: «50 razones para defender la corrida de toros«, en un acto que se ha celebrado en el Auditorio del Centro Cultural Casa del Reloj, en Arganzuela, el cual ha presentado una muy buena entrada. El escritor galo ha estado respaldado por la Concejala de dicho distrito, María Dolores Navarro; Eduardo Martín Peñato, de la Mesa del Toro; y José Carlos Arevalo, director de la revista 6 Toros 6.
María Dolores Navarroha sido la encargada de «abrir plaza» definiendo la obra de Wolff como una «defensa activa y sobre todo valiente» de la tauromaquia. Martín Peñato, por su parte, declaró que «los ataques de los antitaurinos han tenido un aspecto positivo y es que han servido de revulsivo entre las filas de los amantes de este espectáculo; prueba de ello es que estamos teniendo más actos que nunca como el que nos reúne hoy aquí, y eso es una buena noticia».Sobre la obra presentada, Martín Peñato consideró que«estamos ante una gran oportunidad de utilizar los argumentos que nos ofrece Francis para defender la Fiesta».
José Carlos Arévalorecalcó que dicha obra «nos ofrece la base de nuestros argumentos cuando se trata de defender nuestra afición» a la vez que señaló que«llega en un momento justo pues parece que ahora arrecia el movimiento prohibicionista. No hay que olvidar que la semana que viene comienzan las comparecencias en el Parlament de Cataluña y todo alegato en favor de los toros es bien recibido». «La Fiesta une y cohesiona a las diferentes culturas y prueba de ello es que hoy tenemos a un francés proporcionando unos buenos argumentos. Francia sirve de trinchera en la batalla anti pues allí comprenden y viven esta tradición como pocos».
Por último, el autor del libro, Francis Wolff, ha declarado que los dos argumentos más importantes de los 50 que se recogen en el libro son los siguientes: el primero, la sensibilidad del aficionado, que «no son personas ni crueles, ni sádicas, ni nada por el estilo. De hecho la primera emoción que este espectáculo nos da es la admiración».El segundo, es la bravura del toro«pues éste embiste y lucha en el ruedo, dada su condición, por lo tanto la bravura del protagonista de la Fiesta hace que ésta tenga su razón de ser. La crueldad es la voluntad de hacer sufrir a un ser vivo. No queremos que un toro sufra, sino que luche. Sufrimiento sería cuando un toro no tiene posibilidad de luchar y embestir».
Wolff admite que puede haber personas demasiado sensibles que les produzca animadversión «la sangre y la muerte de un animal en directo»,por lo tanto no asisten a las corridas. Esa opción es «muy respetable» ya que «si queremos ser respetados, tenemos que respetar que haya gente que lo vea de una manera diferentes a nosotros» pero ha hecho hincapié que existen otro tipo de personas que se «organizan bajo el movimiento anti y animalista con el fin de imponer su ideología radicalizada. A esta minoría es a la que hay que combatir con argumentos».
Entre el numeroso público asistente se encontraba el director de la película «Arena», Günter Schwaiger, que se llevó una ovación cerrada al declarar que«los aficionados y la gente pro taurina debemos quitarnos los complejos. Hay aficionados que deberían ‘salir del armario’ pues éste es un espectáculo con unos valores increíbles de los cuales no hay que renegar».
Fotografías: MURIEL