
GUILLERMO LORENTE
Murcia (España)Abriendo puertas. Antonio Puerta se abrió camino con creces y salió en hombros en su debut con picadores en Murcia. El novillero ha caído de pie y ha sorprendido en su presentación con los del castoreño, cortando tres orejas en una tarde de capacidad, solvencia, actitud y aptitud. Puerta ha causado una más que grata impresión, mientras que López Simón también mostró su oficio con el quinto, del que paseó un trofeo en un encierro de Nazario Ibáñez con fondo de mansedumbre en líneas generales. Pablo Belando pechó con el lote de menos opciones.
Antonio Puerta, que debutaba con picadores, ha demostrado querer ser esta tarde. Cortó las dos orejas del sexto, el novillo con más cuajo e importancia. Puerta no lo dudó y se fue a la puerta de chiqueros, para recibirlo con dos largas a portagayola. No se amilanó nunca y toreó siempre con firmeza y valor dejando patente su concepto de toreo vertical y estético. Con el novillo a menos, se metió en la corta distancia para dejar circulares por la espalda perfectos.
Antes paseó la oreja del manso tercero, que tuvo movilidad y cierta transmisión, aunque no terminó de humillar nunca. Causó una grata impresión el joven, que cuajó series con emotividad muy valiente y firme. El novillo cantó su condición y terminó en tablas, terreno donde Puerta se desenvolvió con gran desparpajo y frescura. Lo mató de una estocada en lo alto pero el puntillero lo levantó, motivo por el que perdió la segunda oreja.
Alberto López Simón cortó una oreja del quinto, un animal mansito pero con movilidad que se dejó más que sus hermanos. El novillero estuvo muy firme y muy seguro en todo momento demostrando su oficio. Inició la faena toreando en redondo con mucha sobriedad en el toreo fundamental para luego apostar en las cercanías dando una sensación de superioridad. Mató bien y fue premiado con una oreja. El segundo de la tarde fue otro novillo manso pero con genio. López Simon se impuso a base de firmeza y valor desmedido.
Pablo Belando se enfrentó a un primero manso y rajado que nunca se empleó. El novillero local estuvo muy firme y en torero enfrentándose a su enemigo con mucha solvencia. El cuarto fue otro ejemplar manso y agarrado al piso. Belando le atacó mucho siempre y se enfrentó a él con muchas ganas. Pinchó y aunque no tuvo demasiada opción de lucimiento podría haber cortado una oreja.
Plaza de toros de La Condomina. Un tercio de plaza. Novillos de Nazario Ibáñez, bien presentados, con fondo de mansedumbre en general, Con más movilidad y transmisión tercero y manejables quinto y sexto. Más deslucidos primero y cuarto. Pablo Belando palmas y ovación tras aviso; López Simón ovación y oreja, y Antonio Puerta, que debutaba con picadores, oreja tras aviso y dos orejas.
FOTO: GUILLERMO LORENTE