Por demás emotivo resultó el homenaje al finado Curro Rivera desde el mediodía, cuando se ofició una misa para pedir por el eterno descanso del alma del maestro que murió el pasado martes, mientras toreaba en un tentadero en la ganadería de su familia. Se calcula que más de mil aficionados acudieron a este ceremonial, que se desarrolló en el ruedo de la plaza, pero quizás el momento más emotivo se suscitó cuando se escuchó el clarín, ordenando el inicio del festejo, se abrió la puerta de cuadrillas e inmediatamente salieron los subalternos.
Acto seguido, por la presencia de los hijos del finado diestro, Francisco, el mayor, y el actual novillero Rafael, el menor, que cargaba en una urna las cenizas del cuerpo de su padre, la ovación se prolongó por varios minutos y, a continuación, inició una de las vueltas al ruedo más emotivas que yo recuerde en la historia.
El gran triunfador nuevamente fue El Juli. Otra vez llenó la plaza, faltó un pelo en los generales para el lleno absoluto, y el madrileño que, nuevamente por pinchar, se le ha escapado un triunfo de orejas. Aún así, dejó constancia del gran momento por el que atraviesa.
Con su primero, desde el capote, al torear por verónicas y después en el quite por chicuelinas y tafalleras, ha echo gala de entrega y pasión por el triunfo. Con las banderillas ha estado soberbio, especialmente en un par por los adentros, con el toro muy cerrado en tablas, de gran exposición. Posteriormente cuajó un faenón con la muleta, pero sin embargo, pinchó y malogró una faena llena de entrega y pasión por triunfar.
Con su segundo no ha logrado brillar como en el segundo de la tarde. A pesar de ello quedó constancia de su enorme valentía y sitio.
El segundo tercio nuevamente aportó gran lucimiento para el diestro hispano que, en este momento, se ha robado el corazón de los aficionados mexicanos, hoy salió a saludar desde el tercio en sus dos toros.
Eloy Cavazos, veterano diestro con treinta y cinco años de alternativa, no ha tenido una de sus tardes. Con su primero, que tenía cualidades, no logró templarlo y estuvo eléctrico, para despacharlo después de un pinchazo y una estocada. Escuchó división de opiniones. Con su segundo, el peor del encierro, abrevió, para retirarse del coso al término del festejo en medio de gran rechifla.
El de Guadalajara, México, Antonio Bricio, después de terminar en el primer lugar del escalafón novilleril en la pasada campaña en España, ha generado gran expectación en su entorno. Sin embargo, tampoco logró triunfar, a pesar de la disposición mostrada durante los tres toros que lidió, pues incluso regaló un séptimo que fue poco propicio para el toreo al igual que el sexto.
Mucho empeño fue lo mejor de su actuación, lo que se demostró en el de la confirmación de alternativa, donde estuvo sobrio y con clase. Después de un pinchazo cobró una buena estocada para saludar desde el tercio.
El encierro de Fernando de la Mora, ha dejado que desear en cuanto a la presentación, pues el toro no ha salido, quizá con la excepción del quinto, varios sospechosamente astigordos, destacando por el juego los lidiados en los tres primeros lugares.