Valentín Luján I MUNDOTORO
MARIBEL PÉREZ > Madrid
‘Al no haberme dado el diagnóstico adecuado, la lesión se ha agravado. Tengo el tendón del bíceps arrancado del hueso. Se me ha acortado el tendón en 9 centímetros’. Finalmente no era una ‘rotura parcial’ como le habían dicho los médicos en Badajoz. Ese es el duro relato del banderillero Valentín Luján, que deberá pasar mañana por el quirófano para ser sometido a una intervención quirúrgica en el Hospital Son Llàtzer de Palma de Mallorca tras descubrirse ayer en una resonancia el verdadero alcance de la lesión que se produjo hace tres semanas en una sesión de entrenamiento.
Un diagnóstico no acertado que ha hecho agravar una seria lesión que podría afectar en el futuro a su completa movilidad, funcionalidad o giros del brazo. Así lo cuenta a Mundotoro el propio Luján: ‘Lo que me dijeron en Badajoz de que era una rotura parcial al final resulta que no es cierto. Es un arrancamiento del tendón del hueso, por lo que hay que operar urgentemente porque del tiempo que hace, que fueron tres semanas, se me ha acortado el tendón en 9 centímetros’.
Lo más importante ante todo es recuperar toda la movilidad del brazo: ‘Lo que me importa ahora es quedar bien, que no me quede el brazo más corto, ni que pierda la fuerza en el brazo ni los giros. El médico es lo que me decía, que en los giros es donde más dificultad hay pero no tiene por qué ir mal, si Dios quiere’.
Luján explica que de haberse detectado a tiempo, la lesión tendría menor gravedad: ‘Casi seguro que me tendrán que poner unos injertos para poderlo llevar de nuevo a su lugar. Cuando los tendones se rompen, se van acortando poco a poco, y al no haberme dado el diagnóstico adecuado, la lesión se ha agravado. En la resonancia se ve que el tendón está arrancado del hueso y han comprobado que está 9 centímetros acortado. Entonces, no sé si dará de sí para volver al sitio donde debe estar o si tendrán que poner unos injertos’.
A pesar de todo, el subalterno mantiene la confianza en los médicos, que esperan que todo vuelva a la normalidad en el futuro: ‘Pensaba que en dos o tres meses iba a poder estar bien, pero ahora posiblemente se alargará más. Pero no tengo más remedio que pasar por el quirófano, por más que me quiera y me cabree. Los médicos esperan que todo vuelva a la normalidad, que no tiene por qué ir mal. Me atiende el Doctor Pérez, un médico especialista en traumatología, y estoy en buenas manos’.
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